Debido a que la capacidad auditiva de perros y gatos es mucho mayor que la de los seres humanos, son susceptibles a padecer un gran sufrimiento con el estruendo de los productos pirotécnicos. En estas navidades debemos tomar precauciones para que nuestras mascotas no padezcan con nuestra bullosa forma de alegrarnos, considerando que muchos de estos animalitos en su intento de evadir tan desagradable situación, los puede invadir un sentimiento fugaz y perderse en una carrera desenfrenada o más bien el estrés pudiera ponerlos agresivos y atacar a cualquier individuo de su entorno.
Ante tal situación es recomendable encerrar a la mascota en una habitación en donde se le pueda poner música antes de comenzar los festejos o bien sea la televisión, aumentándole gradualmente el volumen de manera que se vaya acostumbrando y el sonido pueda amortiguar el ruido pirotécnico. Nunca se le ocurra amarrarlo ya que se puede ahorcar si se pone nervioso, y si tiene más de una mascota es aconsejable ponerlas en habitaciones separadas para que en un acto de violencia no se vayan a hacer daño entre sí.
En último caso se les puede suministrar un sedante previamente prescrito por un veterinario, en los casos de mascotas que manifiestan comportamientos de violencia.
Por: Omar Farías Luces
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